Los altos niveles de glucosa en sangre propios de la diabetes pueden causar daños severos en los sistemas cardiovascular, nervioso, ocular, renal y digestivo. Ante un diagnóstico de diabetes, se requiere un plan de respuesta completo y cuidadosamente vigilado para prevenir complicaciones o reducir el nivel de daño.
¿Cuándo puede la terapia de oxígeno ser de ayuda para un paciente con diabetes?
Siempre, y únicamente, bajo prescripción y estricta vigilancia médica, el uso de oxígeno suplementario, desde un concentrador, podría ayudar a algunos pacientes diabéticos en casos como los siguientes:
1. Mejorar la visión afectada por el edema macular diabético
En un estudio conducido en 2004 por Johns Hopkins Medicine y el Instituto Nacional del Ojo de Estados Unidos, se registró un 43% de reducción del grosor excesivo de la mácula en todos los pacientes que recibieron cuatro litros de oxígeno por minuto durante tres meses a través de cánulas nasales.
2. Reducir el riesgo de pérdida de fuerza y masa muscular
La terapia de oxígeno ayuda a reducir el riesgo de pérdida de fuerza y masa muscular asociada a la diabetes al mejorar la cantidad de oxígeno disponible para distribuir en los diversos tejidos. Esa es la conclusión de un estudio publicado en 2018 por el Centro Nacional de Información sobre Biotecnología de Estados Unidos.
3. Reducir el tiempo de cicatrización y el riesgo de infección en lesiones del pie asociadas a la diabetes
Un estudio desarrollado en 2016 por una empresa estadounidense dedicada a la prestación de servicios de suplementación de oxígeno observó que las lesiones del pie asociadas a la neuropatía diabética reaccionaban positivamente a la administración de oxígeno aplicado directamente desde un concentrador hasta la lesión a través de un tubo especial.
Aunque los resultados no fueron concluyentes, los investigadores involucrados se manifestaban esperanzados. En 2022, un estudio desarrollado por un equipo de investigadores de la India, publicado en la revista Springer, probó que administración de oxígeno concentrado a 42 °C desde un equipo especialmente diseñado para ese propósito facilitó la cicatrización de las lesiones del pie de los cuarenta pacientes que participaron en el estudio. Ya se ven ofertas de varios proveedores de equipos especializados en la aplicación de oxígeno localizado en lesiones del pie diabético.
Cabe destacar que, a pesar de haber recogido resultados alentadores, todos los estudios mencionados cuentan con poblaciones consideradas pequeñas para este tipo de investigaciones y concluyen que se requiere más investigación para que los resultados puedan tomarse como concluyentes.
Es decir, en ningún caso estamos hablando de verdades absolutas. Además, no hay que olvidar que el médico tratante es quien tiene la última palabra en relación con la definición de la necesidad o conveniencia del uso de la terapia de oxígeno para un paciente diabético determinado.
Por favor, consulta siempre a tu médico tratante y nunca apliques ningún tratamiento que ese profesional no haya indicado ni esté aplicando o vigilando directamente.