Poder cuidar de uno mismo debería ser posible para todos, independientemente de las limitaciones físicas. Pero a veces la realidad puede volverse amarga, y con frecuencia nuestros seres queridos requieren de nuestra participación en sus actividades más básicas, lo cual afecta tanto su autoestima como la dinámica diaria de quienes los cuidan.
Aun así, la respuesta ante retos como la pérdida de movilidad puede ser eficiente y, aunque no devuelva la movilidad a su estado deseable, sí se puede recuperar la autonomía y el bienestar emocional de nuestros abuelos.
Estadística impactante
Según la Arthritis Foundation y la Association of State and Territorial Health Officials, la artritis es una condición que impacta a una gran variedad de personas en diferentes etapas de la vida. En los Estados Unidos, aproximadamente 46 millones de adultos mayores de 18 años han sido diagnosticados con esta enfermedad. De ellos, cerca de 19 millones experimentan limitaciones físicas que afectan su capacidad para realizar actividades diarias, como peinarse, vestirse o cocinar.
Y, claro, no sería esta la única causa de que un ser querido en sus años dorados empiece a requerir ayuda para vestirse o peinarse. Son muchas las causas de la pérdida de movilidad de los abuelos. Lo importante es entender que, en cualquier caso, se requieren soluciones prácticas y accesibles para devolverle su independencia y plenitud al abuelo y ayudarlos a retomar el control de su rutina diaria con comodidad y confianza.
Un cambio en la vida de Alicia
A sus 72 años, doña Alicia había enfrentado muchos desafíos, pero ninguno tan pesado como la artrosis en sus hombros, que le dificultaba actividades tan simples como peinarse. Para ella este había sido un gesto relacionado con su autoestima, y solo ahora, que cada vez se le hacía más difícil, se daba cuenta de eso. Al perder la capacidad de arreglarse sin ayuda, sintió que perdía parte de sí misma.
“Bueno, pero no es obligatorio que dependas de nadie. Mi hijo me regaló una cosa maravillosa. Vamos a averiguar cómo conseguirte una”, le dijo su vecina Marta. Así fue como Alicia llegó a adquirir una peineta de mango largo de BETTEN.
Diseñada para personas con movilidad reducida, con este accesorio Alicia volvió a peinarse sin levantar demasiado los brazos ni sufrir dolor. “Ya me puedo peinar yo misma de nuevo”, comenta emocionada.
Esta pequeña victoria la animó a retomar actividades que había dejado de lado, como la jardinería y la pintura amateur. Ahora doña Alicia vuelve a lucir su cabello con orgullo y se siente otra vez capaz, independiente y llena de energía para disfrutar cada día.
Ventajas clave de la peineta de mango largo BETTEN
Un diseño pensado en la movilidad reducida
El diseño ergonómico de esta peineta facilita el peinado al reducir la tensión en los hombros y brazos. Su mango largo y antideslizante permite alcanzar fácilmente todas las áreas del cabello, incluso la parte trasera, minimizando el movimiento necesario. Estas características no solo mejoran la experiencia de peinado, sino que también alivian la incomodidad que puede acompañar a tareas aparentemente simples.
Un paso hacia el bienestar
La peineta de mango largo BETTEN es más que un accesorio, es un aliado que mejora la calidad de vida. Para aquellos que viven con limitaciones físicas, este producto no solo representa comodidad, sino también la posibilidad de disfrutar nuevamente de su cuidado personal con autonomía y dignidad.