Guía práctica para prevenir y tratar enfermedades respiratorias en adultos mayores

A medida que el ser humano envejece las enfermedades respiratorias comienzan a ser más severas en los organismos. Las infecciones de vías respiratorias, entre las que se incluye la influenza, la neumonía y la gripe, constituyen una de las principales enfermedades de mortalidad a nivel mundial en adultos mayores.

 

Según datos de las Naciones Unidas para el año 1975 la cifra de mayores de 60 años alcanzaba los 350 millones de personas; para el año 2000 había alrededor de 600 millones de ancianos, cifra que se duplicará en 2025.

 

Introducción: Problemas respiratorios en adultos mayores

 

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La infecciones respiratorias representan una urgencia geriátrica mundial, porque que perdudican el aparato respiratorio generando complicaciones como la insuficiencia respiratoria, que afecta los músculos, nervios, huesos y en algunos casos los pulmones. 

 

¿Qué es insuficiencia respiratoria?

La insuficiencia respiratoria (IR), es la incapacidad del aparato respiratorio de mantener un adecuado intercambio gaseoso: la sangre deja de tener suficiente oxígeno o tiene demasiado dióxido de carbono. En algunas personas se pueden presentar ambos problemas de forma simultánea, lo que produce una desatención de las necesidades metabólicas del organismo.

 

¿Cuáles son los primeros síntomas de la insuficiencia respiratoria?

Los síntomas de la insuficiencia respiratoria empiezan a ser notorios cuando la persona se siente cansada, confundida, con somnolencia. Además se pueden presentar otros síntomas como: presión arterial alta y aumento de las pulsaciones por minuto (ppm).

Sin embargo, los síntomas que nos advierten de una insuficiencia respiratoria son:

  • Dificultad para respirar (disnea): la dificultad para respirar se produce por la falta de oxígeno. Puede venir acompañada por una sensación de inquietud y ansiedad en la persona.
  • Coloración azulada de la piel (Cianosis): esta coloración azul también se produce por falta de oxígeno en la sangre y a veces se presenta en uñas y mucosas.
  • Respiración rápida (Taquipnea): se da cuando el organismo intenta eliminar dióxido de carbono, aumentando así la frecuencia respiratoria.

 

¿Cuáles son las causas de la insuficiencia respiratoria?

Las enfermedades respiratorias pueden ser producto de infecciones, de un virus (como el coronavirus o Covid-19), de consumo de tabaco u otras formas de contaminación del aire. 

Entre algunas de las causas más comunes están:

  • Fumar o exposición al tabaco (fumadores pasivos)
  • Contaminación ambiental o contaminación del aire en espacios cerrados.
  • Sobredosis de drogas o alcohol.
  • Virus.
  • Inhalación de humo (de incendios) o gases nocivos.
  • Inhalación de productos químicos.
  • Exposición a alérgenos como ácaros, polvo doméstico, polen de pastos y árboles, el pelo de animales y el moho.
  • Asma u otras alergias.
  • Enfermedades de los pulmones, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), neumonía o embolia pulmonar.
  • Problemas con la columna vertebral, como la escoliosis (una curvatura de la columna vertebral). 
  • Daño a los tejidos y costillas alrededor de los pulmones. Pueden producirse por lesiones en la cabeza, en el tórax u otra lesión importante.

 

 

¿Cuáles son los problemas respiratorios que más afectan a los adultos mayores?

 

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En Chile, la población mayor ha venido aumentando de forma progresiva en los últimos años; según datos del Censo Nacional de Chile elaborado por el INE en el año 2017, el grupo mayor de 65 años representa a un 11,4% de la ciudadanía.

Por esta razón, que debemos prestar atención en la prevención y tratamiento temprano de afecciones respiratorias en adultos mayores, y más ahora, que el mundo se ha visto bajo la amenaza de la pandemia Covid-19.

 

Problemas respiratorios más comunes en adultos mayores

La Segunda Encuesta Nacional de Calidad de Vida en la Vejez 2010, realizada por el SENAMA-UC, indica que del grupo mayor de 65 años, el 25% de los encuestados habían presentado tos persistente o ahogos, un 12,3% habían sufrido de EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica), y finalmente un 11% había sufrido de asma bronquial.

Entre los problemas respiratorios más comunes en los adultos mayores están:

 

EPOC

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), es una enfermedad con alta prevalencia a nivel mundial aproximadamente un 15% de la población mundial la sufre.

Consiste en la inflamación de las vías respiratorias y es una condición crónica, irreversible y progresiva, que se caracteriza por presentar los siguientes síntomas:

  • Tos
  • Expectoración
  • Aumento de la secreción mocosa
  • Dificultad para respirar (Disnea)
  • Coloración azul en la piel (Cianosis)
  • Hiperreactividad bronquial.
  • Hipertensión pulmonar.
  • Además, suele asociarse al cáncer de pulmón y la insuficiencia respiratoria. La causa principal de la EPOC según datos de Sanitas, es el hábito de fumar (90% de los casos).

 

La Gripe

La gripe es otra enfermedad que afecta el aparato respiratorio y que se da comúnmente en adultos mayores. Muchas veces se confunde con un resfriado porque ambas tienen síntomas similares como tos, mocos, secreción nasal, dolor de cabeza; sin embargo la gripe tiene mayor afectación en el organismo porque da fiebre alta y dolor muscular.

Los síntomas de la gripe son:

  • Fiebre o sensación de fiebre y escalofríos
  • Tos
  • Dolor de garganta
  • Goteo o congestión nasal
  • Dolores musculares o del cuerpo
  • Dolor de cabeza
  • Fatiga (cansancio)

 

La influenza

La influenza, al igual que la gripe, es una enfermedad respiratoria y ambas son provocadas por un virus. Debido a que estos dos tipos de enfermedades tienen síntomas similares, puede ser difícil notar la diferencia entre ellos basándose solo en los síntomas, pero a diferencia de la gripe, el virus de la influenza sí puede causar hospitalización y ser mortal si no se atiende a tiempo.

Los síntomas de la influenza son:

  • Fiebre con o sin escalofríos
  • Tos
  • Dolor de garganta
  • Secreción o congestión nasal
  • Dolor muscular
  • Dolor de cabeza
  • Fatiga (cansancio)
  • Otros síntomas pueden ser vómitos y diarrea, aunque esto es más común en los niños que en los adultos.

La forma de prevenir la influenza es vacunándose de forma anual.



La Neumonía

La neumonía es una infección pulmonar que afecta a la vía respiratoria inferior e inflama los sacos aéreos de uno o ambos pulmones. Puede estar provocada por microbios llamados bacterias, virus u hongos. En los adultos, las bacterias son la causa más común de neumonía.

 

La neumonía puede variar en gravedad; desde suave a potencialmente mortal. Entre los factores de riesgo que favorecen la neumonía están:

 

  1. La edad: es más grave en bebés y personas mayores de 65 años.
  2. Personas con enfermedades crónicas, (enfermedades del corazón o de los pulmones).
  3. Personas con un sistema inmunitario debilitado (bronquitis, desnutrición, consumo de tabaco, entre otros).

 

Los síntomas varían dependiendo del tipo de neumonía, pero en la mayoría de casos predominan:

 

  • Dolor en el pecho al respirar o toser
  • Desorientación o cambios de percepción mental (en adultos de 65 años o más)
  • Tos
  • Fatiga
  • Fiebre, transpiración y escalofríos con temblor
  • Temperatura corporal más baja de lo normal (en adultos mayores de 65 años)
  • Náuseas, vómitos o diarrea
  • Dificultad para respirar

 

Las enfermedades del sistema respiratorio, son importantes en las personas mayores porque tienen un efecto directo en la salud y en la calidad de vida. También es común que los adultos mayores lleguen a sufrir otras infecciones respiratorias como:

 

  • Asma: inflamación y estrechamiento de las vías respiratorias.
  • Rinitis: inflamación del revestimiento mucoso de la nariz.
  • Faringitis: hinchazón de la parte posterior de la garganta (faringe), entre las amígdalas y la laringe.
  • Bronquitis: inflamación del revestimiento de los bronquios que llevan el aire hacia dentro y fuera de los pulmones.



¿Cómo identificar y prevenir problemas respiratorios en adultos mayores?

 

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Según el estudio “Las enfermedades respiratorias del adulto mayor en Chile”, elaborado por Ricardo Sepúlveda, las personas al envejecer presentan un aumento de la rigidez de la caja torácica lo que provoca una pérdida de la fuerza pulmonar y disminución de la fuerza de los músculos respiratorios.

 

En otras palabras, la función pulmonar de los adultos mayores disminuye ligeramente con los años. En general esto no representa un problema en personas sanas que pueden respirar sin esfuerzo, pero si es un riesgo cuando la persona tiene dificultad para respirar (disnea), pérdida de masa muscular, sedentarismo, alteraciones cardiovasculares, anemia, entre otros.

 

Para identificar y prevenir las enfermedades respiratorias, listamos a continuación las acciones:

 

Identifica los síntomas generales de una enfermedad respiratoria

Existen muchos síntomas según la enfermedad respiratoria, sin embargo hay síntomas generales que generan alarma, estos son:

  • Fiebre y escalofríos
  • Tos con o sin flema
  • Dificultad para respirar (Disnea)
  • Coloración azul en la piel (Cianosis)
  • Congestión nasal
  • Fatiga o malestar general
  • Aumento en la presión arterial
  • Ataques o convulsiones

 

Si identificas estos síntomas debes ponerte en contacto con tu médico de cabecera.

 

Toma medidas para prevenir la insuficiencia respiratoria

El humo del ambiente como el smog, el cigarrillo, el polvo y los cambios bruscos de clima son factores que producen daños en el aparato respiratorio y pueden contribuir al envejecimiento de nuestras células.

 

Al igual que alimentarnos bien nos ayuda a mantener un cuerpo sano, tener hábitos para mantener nuestras vías respiratorias saludables son medidas que se deben tomar para mantener un buen funcionamiento del aparato respiratorio.

Toma las siguientes medidas para cuidar tu aparato respiratorio:

  • No fumar y si fumas intenta bajar al mínimo la dosis diaria (ojala si puedes deja el cigarro).
  • Declara tu vehículo y tu casa libre de humo de tabaco o de cualquier tipo de humo.
  • Mantente hidratado.
  • Aliméntate de forma saludable y balanceada, incluye frutas y verduras.
  • Colócate de forma anual la vacuna contra la influenza y la vacuna antineumocócica.
  • Evita el contacto cercano con personas enfermas con gripe o resfriado.
  • Lava tus manos después del contacto con personas infectadas.
  • Fomenta la higiene respiratoria en tu familia: es decir, cubrir la boca y la nariz al toser o estornudar. Además de hacerlo con el brazo y no con tu mano.
  • Mantén una ventilación adecuada de las habitaciones del hogar.
  • Si tienes visitas, enséñales el uso apropiado del equipo de protección personal y la higiene de las manos.
  • Si tienes asma o alergias, elimina todos los desencadenantes caseros como ácaros del polvo o el moho.
  • Si el médico te receta, puedes nebulizarse en casa para tratar de forma temprana una enfermedad pulmonar.



¿Cuáles son los mejores tratamientos alternativos para problema en vías respiratorias?

 

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Existe alternativas para tratar problemas respiratorios que se pueden llevar a cabo en casa y ahorrar la ida a una cita médica. Te mencionamos algunas de ellas:

 

Técnica de los labios fruncidos

Esta técnica ayuda a usar menos energía al respirar. Puedes aplicarla cuanto te falta el aliento y se hace al disminuir el ritmo de la respiración para tener menos dificultad para respirar.

Pasos para realizar la respiración con los labios fruncidos:

 

  • Relaja los músculos del cuello y los hombros.
  • Siéntate en una silla cómoda con los pies en el suelo.
  • Inhala lentamente por la nariz en 2 tiempos.
  • Siente cómo se agranda el vientre a medida que inhala.
  • Frunza o arruga tus labios como si fuera a silbar o a apagar una vela.
  • Exhala lentamente por los labios en 4 o más tiempos.

 

 

Inhalación de vapor con nebulizador ultrasónico

Este es un método que se usa generalmente en adultos mayores y sirve para aliviar la congestión en las vías respiratorias. 

La mayoría de los nebulizadores son pequeños y fáciles de transportar. Estos aparatos funcionan con compresores de aire; sin embargo también está el nebulizador ultrasónico, que utiliza vibraciones sónicas.

Pasos para utilizar un nebulizador ultrasónico:

  • Prepara la dosis de medicina recetada por tu médico
  • Asegúrate de que el nebulizador ultrasónico esté limpio antes de usarlo.
  • Debes estar sentado y erguido, en una posición que te resulte lo más cómodo posible.
  • Prepara la solución a nebulizar pocos minutos antes de comenzar a aplicar el tratamiento.
  • Empieza a inhalar, respirando de forma normal, pero no hables mientras aplicas el tratamiento. Estos suelen durar entre 15 y 25 minutos.
  • Cuando termines de aplicar tu tratamiento, procede a limpiar el aparato y ponerlo a secar para volver a utilizarlo la próximo vez que lo necesites.

 

 

Respiración “abdominal” o respiración profunda

La respiración abdominal o profunda, se asemeja a la respiración de labios fruncidos pero es un poco más exigente. En esta técnica debes inhalar (unidireccionalmente), a través de la nariz y la boca, buscando llenar de aire los tramos inferiores de los pulmones.

 

Pasos para realizar la respiración con los labios fruncidos:

  • Acuéstate cómodamente, puedes usar una almohada si la necesitas.
  • Respira profundamente por la nariz, llenando los pulmones de aire.
  • Exhala lentamente por la boca para vaciar los pulmones de aire.
  • Si te falta el aire, intenta realizar el ejercicio mientras esperas a tu médico.
  • Si tienes la falta de aire crónica, puedes optar por hacer este ejercicio una o dos veces al día de forma diaria con la autorización de tu médico tratante.
  • Este ejercicio también puede aliviar el dolor de espalda baja.

 

 

Limpia las vías respiratorias con bombas de aspiración

Las bombas de aspiración se usan en pacientes que tienen problemas en los músculos para producir secreciones. Se usa la bomba para para aspirar el moco, líquidos como las secreciones y limpiar las vías respiratorias (bronquios).

 

Pasos para usar las bombas de aspiración:

  • Conecta la sonda de plástico (flexible, larga y transparente) a una bomba de aspiración.
  • Coloca el otro extremo en la fosa nasal que quieras limpiar.
  • Cuando la sonda está en el lugar adecuado, acciona la bomba de aspiración de forma intermitente, en periodos de 2 a 5 segundos.
  • Algunas veces se introduce un poco de solución salina en la sonda para facilitar la extracción de secreciones y células mediante aspiración.

 

 

Utiliza un nebulizador de compresión

Un nebulizador de compresión es una pequeña máquina que convierte la medicina líquida en vapor, así la medicina ingresa a sus pulmones a medida que se toman respiraciones profundas y lentas durante 10 a 15 minutos. Con la ayuda de un nebulizador es más fácil y agradable inhalar la medicina hacia los pulmones.

 

Pasos para utilizar un nebulizador de compresión:

  • Lávate bien las manos.
  • Conecta la manguera a un compresor de aire.
  • Llena el recipiente de la medicina con la cantidad recetada por tu médico. Cierre herméticamente el recipiente de la medicina para evitar derrames.
  • Conecta la manguera y la boquilla al recipiente de la medicina.
  • Coloca la boquilla en la boca y mantén los labios firmes alrededor de la boquilla para que toda la medicina ingrese en los pulmones.
  • Respira por la boca de forma lenta y profunda, de 10 a 15 minutos.
  • Apaga la máquina cuando termines de respirar tu dosis.
  • Lava el recipiente de la medicina y la boquilla con agua y ponlos a secar al aire hasta tu próximo tratamiento.

 

 

Qué artículos debe considerar tener en casa si mi adulto mayor tiene problemas respiratorios:

 

Oxigenación Generica

Tomar medidas de prevención y de limpieza de las vías respiratorias es un hábito que ayuda a mantener la salud de tu aparato respiratorio. 

 

Si las vías respiratorias están algo inflamadas o irritadas y no se intenta reducir los síntomas, es muy probable que estos empeoren y termines yendo de emergencia al médico. 

 

Por eso, una gran ventaja que debes conocer es que que hoy en día existen artículos de cuidado de las vías respiratorias que se pueden tener en casa (siempre con suscripción médica, claro está). Estos artículos te ayudarán a tener más control de tu salud respiratoria, te mencionamos cuáles son: 

 

  • Concentrador de oxigeno

El concentrador de oxígeno, es una herramienta que le brinda a los pacientes una solución más práctica, segura y económica para ser empleada en en el hogar y que se usa principalmente para proporcionar oxígeno a pacientes con enfermedades respiratorias.

Este artefacto se encarga de tomar el aire del ambiente, lo filtra y luego lo comprime de forma continuada, por lo que el suministro de aire nunca se agota a diferencia de lo que sí sucede con los tanques de oxigeno.

 

  • Nebulizador

 

Los nebulizadores son artefactos que ayudan a transformar los medicamentos líquidos en vapor para que los pacientes con problemas respiratorios puedan medicarse sin hacer mayor esfuerzo permitiéndole al adulto mayor aspirar la dosis que necesita.

Existen nebulizadores ultrasónicos y nebulizadores de compresión, pero en ambos la función es convertir el medicamento líquido en un vapor fino  que pasa a la mascarilla.

 

  • Bomba de secreción

 

Como se mencionó anteriormente las bombas de aspiración son artefactos que se usan para el cuidado médico básico de pacientes con problemas respiratorios. Se usan en casa para extraer secreciones como moco, líquidos y limpiar las vías respiratorias (bronquios).

 

  • Oximetro de pulso

 

Un oxímetro de pulso es un dispositivo médico que se usa para medir indirectamente la frecuencia cardíaca y la saturación de oxígeno que se encuentra en la sangre de un paciente. El aparato se coloca en el dedo y al activarse emite rayos de luz que pasan a través de la sangre de su dedo para medir los niveles de oxígeno. También puede indicar la frecuencia cardíaca (pulso). Esta técnica es menos invasiva que comprobar directamente el nivel de oxígeno en la sangre.




Diferencias y consideraciones a tomar antes de escoger un tratamiento para mi adulto mayor

 

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Ahora que tenemos el foco en las enfermedades respiratorias, empiezan a surgir dudas de qué tratamientos y dispositivos médicos podemos utilizar en casa para ayudar al organismo a respirar mejor.

 

Antes de que selecciones un dispositivo médico, te mencionamos las diferencias que existen entre ellos y aparatos con funciones similares.

 

Diferencias entre concentrador de oxigeno y tanque de oxigeno

 

la principal diferencia entre un tanque de oxígeno y un concentrador de oxigeno es que el primero cuenta con una cantidad finita de oxígeno comprimido y solo contiene oxígeno previamente cargado, no lo produce, mientras que los concentradores tienen un suministro infinito de oxígeno, siempre y cuando el aparato que se está utilizando esté conectado a una red de energía o tenga una batería que le permita mantener activo el mecanismo.

 

La otra diferencia importante a tener en cuenta es que todos los cilindros de oxígeno entregan oxígeno en un flujo continuo, mientras que los concentradores de oxígeno, tienden a variar la administración de dosis de oxígeno, por ejemplo, aplican dosis de oxígeno según el pulso del paciente lo cual en muchos casos es el óptimo en tratamiento de oxigenoterapia.

 

Ventajas de los concentradores de oxigeno vs. tanques de oxígeno

 

Entre algunas de las ventajas de los concentradores de oxígeno portátiles están:

 

  • Tamaño: Los tanques de oxígeno son voluminosos y pesados (hasta 55 kg), mientras que un concentrador de oxígeno portátil está diseñado para poder ser transportado de forma fácil, algunos pueden pesar menos de 2.2 kg dando portabilidad y movilidad.

 

  • Disponibilidad de oxígeno: mientras los tanques de oxígeno pueden quedarse sin oxígeno porque cuentan con una cantidad limitada, un concentrador de oxígeno nunca se quedará sin oxígeno mientras tenga aire disponible y una batería.

 

  • Dispositivo más seguro: los tanques de oxígeno pueden representar un riesgo si el oxígeno llegase a filtrarse en el lugar de uso, dejando el ambiente potenciado de oxígeno, aumentando el riesgo de incendio y dificultando la extinción del fuego. Por su parte, los concentradores de oxígeno son dispositivos que aportan dosis controladas, eliminando la preocupación de fugas al ambiente.



Diferencias entre nebulizador e inhalador de asma


Los nebulizadores y los inhaladores tienen una función similar: transformar los medicamentos líquidos en vapor para aliviar los síntomas y dolencias de pacientes con problemas respiratorios. Sin embargo, entre estos dos dispositivos existen algunas diferencias que deben ser evaluadas al momentos de escoger el dispositivo. Veamos las diferencias a continuación:

 

  • Tamaño: Los nebulizadores suelen ser más grandes y los inhaladores de tamaño más reducido; aunque hoy en día existen nebulizadores portátiles (de mecanismo ultrasónico) que son pequeños y livianos.



  • Diseño: El diseño de un nebulizador puede variar en forma, a veces se usa con mascarilla facial mientras que otra veces tiene una boquilla por donde se inhala el vapor fino. Por su parte el diseño de los inhaladores tiene la forma de pequeñas latas de aerosol.



  • Activación: El nebulizador es un dispositivo que se activa con la energía de baterías o de corriente continua. Por el contrario, un inhalador no necesita de baterías o de corriente continua, se activa de forma manual.



  • Uso: Para usar un nebulizador el paciente no tiene que “hacer” nada para medicarse, incluso puede estar costado en la cama, ya que el medicamento líquido se coloca el dispositivo y cuando este se enciende envía un vapor fino a la mascarilla permitiéndole al adulto mayor aspirar la dosis que necesita.



  • Función: Aunque la función de un nebulizador y un inhalador son muy similares, existe una pequeña diferencia que se basa en que los inhaladores se utilizan para la inhalación seca. Con este tipo de inhalación, el ingrediente activo se inhala como una mezcla de polvo y aire.



Ventajas y desventajas de cada dispositivo

 

Nebulizadores

La ventaja de los nebulizadores, independiente del tipo de tecnología que use (ultrasónicos, de aire comprimido, o de malla); la dosis de medicamento se inhala en pequeñas gotas y no requiere de ninguna técnica especial de respiración.

La desventaja es tarda más tiempo en administrarse la misma cantidad de dosis que un inhalador.

 

Inhaladores

La ventaja de un inhalador es que la dosis administrada siempre se determina con mucha precisión (normalmente se usan para aplicar medicamentos de alivio de emergencia para el asma y otras enfermedades de las vías respiratorias inferiores).

La desventaja de los inhaladores es que necesita coordinar su inhalación de forma precisa con el momento en que se dispara la dosis para asegurar la aplicación correcta.

Ahora que conoces las formas de identificar, prevenir y tratar problemas respiratorios, es recomendable que busques asesoría de tu médico para poder evaluar los dispositivos médicos y tratamientos que mejor se adapten a tus necesidades.

 

 

Guía práctica para prevenir y tratar enfermedades respiratorias en adultos mayores