Cuaderno de estimulación cognitiva para el adulto mayor

¿Qué causa el deterioro cognitivo?

No existe un factor único que genere deterioro cognitivo, este se da por una combinación de diversos factores que pueden ocasionar pérdida de memoria involuntaria y menos capacidad de retención de la información, de atención y de percepción visual.

El estudio de la revistas médica de Chile Scielo, también da a conocer los principales factores asociados a sospecha de deterioro cognitivo en población chilena, estos son:

• Edad mayor de 65 años
• Depresión 
• Alto tiempo sedente o dormir más 9 horas al día
• Bajo nivel de escolaridad
• Sexo masculino
• Inactividad física
• Malnutrición o bajo consumo de frutas y verduras
• Tener problemas de audición o visuales
• Tener alguna discapacidad
  
  

¿Cuáles son los tipos de deterioro cognitivo?

Los especialistas determinan el grado de deterioro cognitivo a través de la realización de distintos test psicométricos que cuantifican las funciones cognitivas y de función en la vida diaria del paciente.

Los resultados de estos test indicarán el tipo de deterioro que presenta la persona como deterioro cognitivo leve o demencia (leve, moderada o grave):

1. Deterioro cognitivo leve: consiste en deterioro leve de la memoria y de algunas funciones cognitivas que no implican repercusión sobre las actividades diarias del paciente.
   
   
2. Demencia leve: Se comienza a afectar la vida del paciente, hay cambios de humor, se evidencian problemas de la memoria reciente y olvida nombres de personas muy cercanas. Además, se puede presentar cierto grado de desorientación en el tiempo y en el espacio.
   
   
3. Demencia moderada: Los síntomas se hacen más evidentes. Hay dificultad en el aprendizaje, se observa desorientación en el tiempo y en el espacio (incluso en lugares conocidos), se agitan, a veces son agresivos, presentan ansiedad o depresión. 
   
   
4. Demencia grave: en este estado es difícil comunicarse con el paciente, hay pérdida de memoria y se presenta incapacidad para pensar, comunicarse, tomar decisiones o realizar las actividades diarias. El paciente no puede cuidar de sí mismo y es totalmente dependiente de sus cuidadores. 
   
   
5. Demencia: es el estado cuando ya se han visto afectadas todas las funciones cognitivas que impiden llevar una vida normal o que el paciente se haga cargo de sí mismo. En la demencia se ven afectadas la memoria, las áreas del lenguaje, las funciones cerebrales y muchas veces se alteran los rasgos de la personalidad. 
   
   
   

¿Cómo prevenir el deterioro cognitivo?

En la prevención del deterioro cognitivo hay factores de riesgo que no puedes cambiar como es la edad (el riesgo aumenta después de los 65 años); los antecedentes familiares y el Síndrome de Down (muchas personas con síndrome de Down presentan la enfermedad de Alzheimer).

Sin embargo, hay formas de prevenir el deterioro cognitivo, la Clínica Las Condes publicó una lista de recomendaciones a seguir para para reducir el riesgo de demencia y deterioro cognitivo:

• Realizar ejercicio: al menos 2 horas y media de actividad física durante la semana. 
• Limitar el consumo de alcohol y no fumar. 
• Mantener una dieta saludable: preferir la ingesta de pescado, frutas y verduras, limitando el consumo de alimentos procesados y carnes rojas. 
• Mantener un peso adecuado.
• Controlar enfermedades cardiovasculares.
• Mantenerse socialmente activo, relacionarse con otras personas, familiares y amigos.
• Ejercitar la mente con crucigramas, puzles, juegos y manualidades.

Consejos para personas con deterioro cognitivo

• Tener una rutina diaria: la planificación ayuda a la persona a orientarse en tareas concretas que debe realizar por la mañana, la tarde y la noche. Los patrones regulares dan confianza y seguridad.

• Mantener la autonomía de sus actividades: todo lo que la persona pueda hacer por sí misma, debe seguir haciéndolo de forma habitual. Mientras más responsabilidades sea capaz de llevar a cabo, más se ejercita la mente y se previene el deterioro cognitivo.

• Incorporar aficiones y hobbies en la rutina diaria: Procure que retome antiguas aficiones, antiguas colecciones o que realice actividades con las manos como la pintura, la cocina o las manualidades.

• Escribir listas para diligencias que están fuera de la rutina diaria: cuando la persona deba realizar una tarea que no forme parte de su rutina diaria, lo mejor será escribir listas, dejar recordatorios por escrito en lugares visibles y alarmas para que sirvan de recordatorio.

• Reducir la complejidad en la comunicación: si estás a cargo de una persona mayor, lo mejor será comunicarse utilizando frases sencillas y concretas. Si vas a dar alguna instrucción, mejor hacerlo de forma corta y clara. Lo mismo con las tareas, si son tareas muy complejas lo aconsejable será acompañar o ayudar a la persona en la realización de dichas tareas.

• Mantenerse activo físicamente: otro consejo para prevenir y tratar la pérdida cognitiva, es mantenerse activo físicamente. El ejercicio más recomendado, saludable y sencillo que pueden realizar las personas mayores es caminar al menos 30 minutos diarios. Es ideal salir a pasear y si es posible participar en programas de psicomotricidad en su entorno. 

• Ayuda con los pagos y el manejo del dinero: las personas que sufren de pérdida cognitiva moderada pueden cometer errores muy graves con transacciones monetarias, sean en físico o de forma digital. Hay que supervisar al adulto mayor cuando sea momento de realizar pagos, hacer transferencias bancarias y realizar compras. No se trata de que no tenga acceso al dinero, sino de acompañarlos en las compras y pagos para brindarles apoyo y ayuda en caso de que lo necesiten. 

• Busca ayuda: si la persona vive sola, lo aconsejable será buscar un cuidador, sea a tiempo completo o parcial con la frecuencia que se considere necesaria. Si la persona ha perdido capacidades físicas y no es capaz de mantener su higiene o alimentarse sola, entonces será necesario contratar ayuda profesional; de lo contrario, bastará con una persona que ayude en las tareas del hogar, como cocinar y limpiar. 

• Mantener una buena alimentación: otro consejo que no puede faltar para personas con pérdida cognitiva, es mantener una dieta equilibrada que incluya fibra, vegetales y frutas. Además, se debe evitar las calorías vacías como las papas fritas o dulces; y consumir alimentos bajos en colesterol y grasas. También te contamos ¿Cómo asistir a una persona mayor que requiere ayuda para alimentarse?

• Mucho cuidado al conducir: es importante preguntarle al médico de cabecera si la persona está en condiciones de conducir; en caso de que la respuesta sea negativa, habrá que abordar el tema con mucha paciencia, respeto y empatía, comunicando siempre el peligro que implica la desorientación en el manejo y los riesgos que se deben evitar para ocasionar daños a terceros o a sí mismo.

• Salidas vigiladas: es importante animar a la persona mayor a realizar caminatas diarias, recorrer las calles cercanas, visitar a los vecinos y pasear por las adyacencias lo que le permitirá a ejercitar sus capacidades de orientación espacial. Sin embargo, si necesita o requiere salir a lugares nunca antes visitados o que no conoce bien, lo mejor será que el adulto vaya acompañado.

Es importante que la familia pueda unirse para brindar compañía y apoyo a la persona que se encuentra con deterioro cognitivo.

Ejercicios de atención

La atención en los adultos mayores es uno de los procesos cognitivos más significativos, ya que juega un papel importante en el desempeño de la mayoría de actividades cotidianas.

La atención es la habilidad mental que nos permite mantener un estado de activación al procesar la información que recibimos del entorno. Por eso los ejercicios de atención, apoyan los procesos cognitivos de concentración, vigilancia, orientación, identificación y atención sostenida.

Según la revista médica Scielo, la atención en el adulto mayor es la función que sirve de mecanismo de activación y funcionamiento de otros procesos mentales más complejos como la percepción, la memoria o el lenguaje, mediante operaciones de selección, distribución y mantenimiento de la actividad psicológica.

Desde BETTEN recopilamos ejercicios de atención sostenida para trabajar este proceso mental en los adultos mayores. Todos los ejercicios de atención te ayudarán a fortalecer el rastreo visual, la búsqueda visual, la señalización y localización de los objetos que se indican.

Para realizar los ejercicios, debes descargar el cuadernillo de estimulación cognitiva, leer las instrucciones y acentuar la atención mientras realizas cada ejercicio.

Un ejemplo de los ejercicios que encontrarás:

Ejercicios de Percepción

Cuando envejecemos notamos que nuestra capacidad mental va disminuyendo, esto puede ser a causa de la edad; de alguna patología o por hábitos de vida inadecuados que perjudican nuestro funcionamiento cognitivo. 

Sin embargo, existen técnicas de estimulación cognitiva que nos ayudan a prevenir el deterioro e incluso a mejorar el funcionamiento de nuestras capacidades mentales.

¿Qué tipos de percepción existen?

Los tipos de percepción de dividen en función de nuestros cinco sentidos:

• Percepción visual: es la capacidad que tenemos para interpretar la información visible que llega a nuestros ojos. 
  
  
• Percepción auditiva: es la capacidad que tenemos de recibir e interpretar la información que llega a nuestros oídos mediante las ondas de la frecuencia audible transmitidas por el aire u otro medio (sonido). 
  
  
• Percepción táctil: es la capacidad para interpretar la información de presión y vibración recibida en la superficie de nuestra piel.
  
  
• Percepción olfativa: es la capacidad de interpretar la información de olor de sustancias que se encuentran en el aire.
  
  
• Percepción gustativa: es la capacidad para interpretar las sustancias químicas disueltas en la saliva (sabor). 

Para ayudarte a mejorar la percepción visual mediante entrenamiento cognitivo, hemos recopilado algunas actividades que encontrarás en el descargable. 

Te compartimos algunos ejemplos de los ejercicios que encontrarás:

Ejercicios de memoria

La memoria es la capacidad que nos permite recordar los momentos vividos, personas que han formado parte de nuestras vidas, los lugares que hemos visitado, y es la responsable de todo nuestro conocimiento y habilidades profesionales.

Los fallos de memoria son una de las quejas más habituales del proceso de envejecimiento; más del 50% de las personas mayores de 60 años tiene alguna dificultad, mucha dificultad o incapacidad para recordar.

Para mantener la memoria, hay que ejercitarla al igual que ejercitamos otros músculos de nuestro cuerpo. 

La plasticidad cerebral, o neuroplasticidad, se mantiene constante a lo largo de toda la vida; siempre y cuando el cerebro se ejercite.

Para ayudarte ejercitar tu capacidad de retención, hemos recopilado los mejores ejercicios de memoria que puedes obtener al descargar el PDF, llenando el formulario.

Te mostramos dos ejemplos de los ejercicios de memoria que encontrarás: 

Ejercitar la mente, junto a unos hábitos de
vida saludable, reduce el riesgo de sufrir
deterioro cognitivo. 

Desde BETTEN esperamos que disfrutes de este cuadernillo de estimulación cognitiva.