Betten Blog

Beneficios de la kinesioterapia para pacientes en cama

Escrito por Mariví Coello | 21 de agosto 2024

La kinesioterapia es una herramienta clave para mantener la calidad de vida de quienes pasan mucho tiempo en la cama debido a una enfermedad grave, una cirugía o una discapacidad transitoria o permanente, pues ayuda a evitar complicaciones adicionales y facilita una recuperación más rápida. 

Así que, si tienes a un familiar en cama, cuanto antes consultes a un especialista que le proporcione este tipo de cuidado, menos problemas y complicaciones habrá para el paciente y sus familiares.

¿Qué es la kinesioterapia?

La kinesioterapia se define como la aplicación terapéutica de los principios de la kinesiología, una disciplina médica que estudia el movimiento del cuerpo y se enfoca en el tratamiento de problemas musculoesqueléticos y neuromusculares mediante ejercicios y técnicas de movilidad. Aunque comúnmente se asocia con personas activas o en recuperación de lesiones, es igualmente ventajosa para pacientes en cama. 

 

 

Principales aportes de la kinesioterapia a la salud general de pacientes en cama

  1. Mejora la circulación sanguínea. Cuando estamos inmóviles, la sangre puede acumularse en ciertas áreas del cuerpo, lo que aumenta el riesgo de trombosis y úlceras por presión. La kinesioterapia aporta movimientos, ya sea de manera activa, es decir, movimientos que haga el paciente por sí mismo, o pasiva, movimientos que haga el terapeuta en partes específicas del cuerpo del paciente.
  2. Previene la atrofia muscular. Una masa muscular saludable está directamente relacionada con la salud metabólica, la prevención de enfermedades crónicas y la longevidad; y es indispensable para poder realizar actividades de la vida diaria tan básicas como asearse y comer. La kinesioterapia ayuda a contrarrestar o prevenir la pérdida de fuerza y movilidad al mantener los músculos activos, por lo que promueve la independencia del paciente, más allá de sus limitaciones.
  3. Mantiene la movilidad articular. La rigidez articular producto de la falta de movimiento dificulta aún más la movilidad. Los ejercicios de kinesioterapia ayudan a mantener las articulaciones flexibles y en movimiento, reduciendo el riesgo de rigidez.

 

Técnicas y ejercicios de kinesioterapia para pacientes en cama

  1. Ejercicios de movilización pasiva. Estos ejercicios se realizan con la ayuda del kinesiólogo, quien mueve las extremidades del paciente sin que este participe activamente. Son útiles para mantener la movilidad articular y prevenir rigidez.
  2. Ejercicios de estiramiento. Los estiramientos suaves ayudan a mantener la flexibilidad y prevenir contracciones musculares. Se pueden realizar estiramientos pasivos, donde el kinesiólogo estira los músculos del paciente, o estiramientos activos, si el paciente es capaz de colaborar.
  3. Ejercicios de fortalecimiento. Incluso en la cama, es posible trabajar en la fuerza muscular. Se pueden utilizar bandas elásticas o incluso la resistencia del propio cuerpo para fortalecer los músculos sin necesidad de equipos complicados o costosos.


Consideraciones especiales en la aplicación de la kinesioterapia en pacientes en cama

  1. Evaluación de riesgos y seguridad. Es fundamental realizar una evaluación de riesgos antes de iniciar cualquier programa de kinesioterapia. Esto incluye revisar la condición médica del paciente, su capacidad para participar en los ejercicios y cualquier riesgo potencial asociado. Nunca intentes realizar ejercicio de kinesioterapia por cuenta propia sin asesoría de un especialista.
  2. Adaptaciones de equipamiento y espacio. El espacio en el entorno de cama puede ser limitado, por lo que los ejercicios deben adaptarse para ser seguros y efectivos en este contexto. El uso de equipamiento adaptado puede facilitar la realización de los ejercicios sin comprometer la seguridad del paciente.
  3. Indicaciones y contraindicaciones. La kinesioterapia es indicada en pacientes con movilidad reducida que requieren mantenimiento de su función física, prevención de complicaciones secundarias a la inmovilidad y mejora general de su bienestar; mientras que, para pacientes con ciertas condiciones médicas como infecciones agudas, fracturas inestables o complicaciones cardiovasculares graves, no es aconsejable su implementación. 

Papel del kinesiólogo en el tratamiento de pacientes en cama

Además de diseñar y supervisar un programa de ejercicios, el kinesiólogo realiza una evaluación exhaustiva del estado físico del paciente, considerando su condición médica, nivel de movilidad y cualquier otra consideración relevante. Con esta información, el profesional desarrolla un plan de ejercicios adaptado a las necesidades específicas del paciente, asegurando que sea seguro y efectivo. Su principal responsabilidad es evaluar los riesgos y determinar contraindicaciones.

Asimismo, el kinesiólogo trabaja estrechamente con los cuidadores y familiares del paciente, brindándoles la capacitación necesaria para apoyar adecuadamente la rehabilitación del paciente en el entorno de cama. Esto incluye instruir sobre cómo realizar correctamente los ejercicios pasivos y activos, así como la importancia de mantener una posición adecuada.

El kinesiólogo también actúa como enlace entre el paciente y otros profesionales de la salud, asegurando que todos los aspectos del cuidado estén coordinados y que el paciente reciba el mejor tratamiento posible.